Inicio » Content » DOMINGO DE PENTECOSTÉS

“Cree en el Espíritu Santo y piensa de Él lo que has aceptado del Padre y del Hijo. Aprende, por tanto, que este Espíritu Santo es uno y, además, indiviso y omnipotente. Al realizar muchas cosas, no obstante, no se divide. Conoce los misterios, todo lo escruta, hasta las profundidades de Dios; descendió sobre el Señor Jesucristo en forma de paloma (cf. Lc 3,22), había estado actuante en la ley y los profetas, pero también ahora sella tu alma con ocasión del bautismo: de su santidad necesita ahora toda naturaleza racional y, si alguien se atreviere a blasfemar contra Él, no se le perdonará ni en este mundo ni en el venidero (cf. Mc 3,29). Juntamente con el Padre y el Hijo posee el honor y la gloria de la divinidad; también de Él necesitan los tronos y las dominaciones, los principados y las potestades. Pues solo hay un Dios, Padre de Cristo; y hay un solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios; y un solo Espíritu Santo, que todo lo santifica y lo deifica, y que habló en la Ley y los Profetas, en la antigua y en la nueva Alianza” (san Cirilo de Jerusalén, Catequesis, 4,16).