Inicio » Content » DIFUSIÓN DE LA OBRA DE SANTA GERTRUDIS (5)

Anónimo, escudo pectoral de monja con tema de la Inmaculada Concepción coronada por la Trinidad isomorfa y rodeada por san José y el Niño, san Agustín, santa Bárbara, san Juan Nepomuceno, san Francisco Javier, santa Gertrudis Magna, ¿santa María Magdalena? y san Miguel arcángel; óleo sobre cobre, armazón de carey, 18,4 cms. de diámetro. Hacia 1700-1740, colección particular, catalogación: Juan Carlos Cancino.

 

por Pierre DOYÈRE, OSB †[1]

3. Las ediciones latinas (Continuación)

3.- Insinuationum divinae pietatis libri quinque[2] in quibus vita et acta sanctae Gertrudis monialis Ordinis sancti Benedicti continetur… Omnia haec nunc denique Magistri Fratris Joannis de Castañiza ejusdem ordinis monachi studio atq. diligentia correcta probata et ilustrata scoliis. Anno 1599. Matriti apud haeredes Joannis Iniguez de Lequerica, ex oficina licentiati Varez a Castro[3].

Al explicar en su Prólogo las razones de su edición, Castañiza, monje de San Martín en Madrid dice que, deseoso de hacer conocer los escritos de los santos de la Orden benedictina, había buscado desde hace mucho tiempo las Revelaciones de santa Gertrudis, habiéndolas descubierto por fin en la celda de un cisterciense.

Mientras tanto, Diego de Yepes, obispo de Tarragona escribe en 1603 que, en el momento en que asistía a Felipe II en su última enfermedad (595-1597), fue puesto en conocimiento (de santa Gertrudis) por la lectura de Luis de Blois y descubrió un ejemplar de las Revelaciones enterrado desde hacía una decena de años en la biblioteca de las Jerónimas de El Escorial; del cuál, habiendo hablado con el Padre Castañiza, ambos se estaban empeñando, a pesar de las resistencias, en una nueva edición enriquecida por Castañiza de comentarios teológicos justificativos.

Los dos textos son ciertamente conciliables y podría ser que el de Yepes tuviera el valor de una puesta a punto. Por otra parte en la Vita S. Gertrudis que sigue al Prólogo, Castañiza, al invocar las autoridades favorables a la santa mística, no deja de hacer el elogio de Diego de Yepes, de quien dice que apenas se puede imaginar la devoción que tiene a esta santa, maestra eminente de santidad, de saber y de piedad.

El ejemplar o los ejemplares que han servido de base a esta edición de 1599[4], deberían ser los de Bredenbach, puesto que, en tres variantes notables, esta sigue la versión Bredenbach, no la de Lanspergius[5]. Sin embargo, no se explica que no haya reproducido el Prólogo general que traen tanto Bredenbach como Lanspergius.

Castañiza tiene por original el texto en lengua alemana. Da un interesante testimonio de Ribera sobre la estima que tenía Teresa de Ávila por santa Gertrudis, conocida de ella sin duda por Luis de Blois. Los comentarios propios de Castañiza son excelentes.

4.- Insinuationes divinae pietatis sive legatus memorialis divinae pietatis a Christo sic nominatus in quo praeter vitam S. Virginis Gertrudis Abbatissae Elpidianae in Saxonia Ordinis Sancti Patriarchae Benedicti continentur revelationes, gratiae, etc… opera et studio P. D. Laurentii Clement monachi Monserratensis Pragensis, Ordinis S. Benedicti. Salisburgi, typis Joanni Baptistae Mayr. MDCLXII[6] – in 8.

Clement concoía a Lanspergius. Pero alaba la edición de Bredenbach por su cuidado y la elegancia tipográficas, así como por las notas marginales, y la sigue preferentemente[7]. Para España, conocía la traducción castellana del monje Leandro de Granada Manríquez (1605)[8], sabía de la admiración de Yepes y de otros doctores, pero no dice nada de la edición latina de Castañiza, también benedictino. Igualmente para Francia conocía la traducción de Ferraige, pero no dice nada de la edición latina de Canteleu, que es también de 1662, y que sin duda, no pudo conocer.

Clement, que no dispone de manuscrito alguno, justifica su edición por las incorrecciones de las ediciones precedentes y la rareza de los ejemplares. Hace preceder la obra de una “sinopsis vitae” (síntesis de la vida) de 63 páginas; da algunos extractos del prefacio de Bredenbach y señala una obra de D. Elías Pereul, benedictino de la congregación de San Vano e Hidulfo, “qui matrimonium spiritale Christi Domini cum S. Gertrude in luce edidit lingua vernacula”[9].

5.- Insinuationes divinae pietatis seu vita et revelationes S, Gertrudis Virginis et abbatissae O. S. Benedicti a mendis quibus scatebant expurgatae studio et labore D.N.C.B. Parisiis apud Fredericum Leonard. MDCLXII[10] – in 8.

D.N.C.B = Don Nicolás Canteleu, Benedictino. Junto al epígrafe dedicatorio seguido por el Imprimetur (imprímase) firmado por un religioso de la congregación de san Mauro y por un sucinto Proloquium (prólogo), esta edición reproduce el prefacio de Lanspergius. Trae a continuación algunas páginas sobre Luis de Blois, un elogio de santa Gertrudis de Sabastián Pedro “Nardus” (1658) y los epigramas en versos.

Dom Canataleu dice no tener a su disposición como texto latino, más que  la edición de Bredenbach (1579), de la cual critica el carácter erróneo, sobre todo, de los títulos de los capítulos[11]. No habría tenido entonces a mano ni a Castañiza ni a Clement. Sin embargo, su edición no reproduce el Prólogo general que conocía Bredenbach y que suprimió Castañiza, lo que prueba que Canteleu utilizaba también las primeras traducciones francesas que, hechas en base a Castañiza ignoraban dicho Prólogo.

Don Canteleu tuvo el tiempo de corregir la última prueba de este libro el día de su muerte, 29 de junio de 1662, a los 33 años[12].

6.- Sanctae Gertrudis Virginis et abbatissae ordinis Sancti Benedicti insinuationum divinae pietatis excertitia. Cura et opera D. Antonii Joseph Mège. Parisiis Frederici Leonard- MDCLXIV[13] – in 12.

Es, bajo un título diferente, una simple reedición corregida de la edición de D. N. Canteleu de 1662[14]. La obra contiene, además, los Ejercicios y el Oficio de Santa Gertrudis.

7.- (Revelationes Gertrudianeae ac Mechtildianae) I. Sanctae Gertrudis Magnae Virginis Ordinis Sancti Benedicti Legatus divinae pietatis… Opus ad codicum fidem nunc primus integre editum Solesmensius O.S.B. monachorum cura et opera. Apud Henricum Oudin. Pictavii. Parisiis. MDCCLXXV[15].

Dom Paquelin es el primero de los editores latinos después de Lanspergius que ha entendido revisar el texto buscando la tradición manuscrita. Dos manuscritos han llegado a sus manos: W y Z. Él siguió normalmente W, si bien adoptando las variantes tanto de Z como de los editores precedentes[16].

El prólogo y el libro I, también editados después de los manuscritos difieren sensiblemente de las versiones precedentemente editadas, las cuales dependen todas de Lanspergius, que había debido contentarse para estas partes, como se dice más arriba, con traducir en latín una versión en antiguo alemán.

La edición Paquelin comporta un muy largo prefacio personal (I-LXII), el prefacio de Lanspergius (LXIII-LXXI), el testimonio de Luis de Blois (LXXII), una parte de los extractos de Tilmann Bredenbach que había reproducido Clement (LXXIII-LXIV).

Paquelín ha adoptado también el procedimiento de breves notas marginales que parecen frecuentemente inspiradas en las de Tilmann Bredenbach.

Continuará

 


[1] Dom Pierre Doyère, OSB, monje de San Pablo de Wisques, fue el impulsor de la revisión y fijación del texto latino de las obras completas de santa Gertrudis y su principal traductor al francés. Murió el 18 de marzo de 1966, durante la preparación de la edición crítica de los libros I a III del Legatus Divinae Pietatis; dos discípulos suyos continuaron la tarea y la obra fue publicada en 1968 por Sources chrétiennes (Gertrude D’Helfta, Œuvres Spirituelles II, L’Héraut [Livres I-II] SCh N° 139 y Œuvres Spirituelles III, L’Héraut [Livre III] SCh N° 143 – Paris, Les Éditions du Cerf, 1968). La fijación del texto de los libros IV y V del Legatus es obra de Jean-Marie Clément, monje benedictino de Steenbrugge, y la traducción al francés, de las monjas de Wisques.

[2] Continuamos con publicación de la Introducción de Pierre Doyère, a la edición crítica latín-francés del Heraldo del Amor Divino. Cfr. Gertrude D’Helfta, Œuvres Spirituelles II, L’Héraut (Livres I-II,) Sources Chrétiennes N° 139 – Paris, Les Éditions du Cerf, 1968, «Introduction», pp. 9-91. Tradujo la Hna. Ana Laura Forastieri, ocso, del Monasterio de la Madre de Cristo, Hinojo, Argentina.

[3] N. de T.: Los cinco libros de las insinuaciones de la divina piedad en los que se contiene la vida y los hechos de santa Gertrudis, monja de la Orden de san Benito… Todas estas cosas ahora por fin correcta(mente) probadas por el estudio y diligencia del Maestro Fray Juan de Castañiza, monje de la misma Orden e ilustradas con notas. Año 1599. Editados (lit.: dados a luz) por los herederos de Joannis Iniguez de Lequerica, en la oficina del licenciado Varez de Castro.

[4] El artículo de Castañiza en el Dictionnaire de Spiritualité da la fecha de 1577 en vez de 1599, pero es simplemente un error de impresión.

[5] En particular, para orationibus illius en lugar de orantibus illis. N. de T.: cfr. la publicación anterior en este misma página: "Difusión de la obra (4)", nota 10, http://surco.org/content/difusion-obra-santa-gertrudis-4.

[6] N. de T.: Insinuaciones de la divina piedad o el así llamado por Cristo Legatus memorialis divinae pietatis (Mensajero del memorial de la divina piedad -es el título dado por Cristo a la obra-), en el cual, además de la vida de la virgen santa Gertrudis, abadesa Elpidiana en Sajonia, de la Orden del Patriarca san Benito, se contienen revelaciones, gracias, etc… por obra y estudio del Padre Don Lorenzo Clement monje de Monserrat de Praga, de la Orden de san Benito. Salzburgo, imprenta de Juan Bautista Mayr. 1662.

[7] En particular, él también pone orationibus illius en lugar de orantibus illis. Cfr. nota 5.

[8] Insinuación de la divina piedad... (Antonia Ramírez, viuda, Salamanca, 1605); la obra comprende los tres primeros libros, más “oraciones” y “ejercicios”. El mismo traductor publicó en Valladolid, en 1613, una traducción de los Ejercicios espirituales.

[9] N. de T.: Quien sacó a la luz el matrimonio espiritual de Cristo Señor con santa Gertrudis, editándolo en lengua vernácula.

[10] N. de T.: Insinuaciones de la divina piedad o vida y revelaciones de santa Gertrudis virgen y abadesa de la Orden de san Benito, expurgada de los errores de que abundaba, por estudio y trabajo de Dom Nicolas Canteleu, Benedictino. En París junto a Federico Leonard, 1662.

[11] Sus correcciones son evidentemente subjetivas y se alejan de los títulos que traen los manuscritos.

[12] Tassin, Historie Littérarie, 62.

[13] N. de T.: Los ejercicios de las insinuaciones de la divina piedad de santa Gertrudis Virgen y abadesa de la orden de san Benito. Por obra y diligencia de Don Antonio Joseph Mège. En París, junto a Federico Leonard, 1664.

[14] Tassin, Historie Littérarie, 132.

[15] N. de T.: (Revelaciones de Gertrudis y Matilde) I. El Mensajero de la Divina Piedad de Santa Gertrudis Magna Virgen de la Orden de san Benito… Obra y manuscrito fiel ahora por primera vez íntegramente editados por obra y diligencia de los Monjes de Solesmes de la Orden de San Benito. Junto a Enrique Oudin. Poitiers. En París, 1875.

[16] Ver por ejemplo en el Libro I capítulo XI un préstamo hecho a Lanspergius, nota 11 bis.