Un tema eclesial de gran actualidad, que requiere ser meditado y rezado por todos los bautizados, es el de nuestra disposición interior hacia la unidad y hacia un verdadero encuentro con todos los demás cristianos, para que el mundo se abra a la fe en Dios Uno y Trino y llegue a ser partícipe de su Plenitud de Vida.
El Cardenal Kasper, con humilde y luminosa presentación a través de una conferencia, nos recuerda en este número cuáles son los principios católicos -dados por Jesús y que el Magisterio de la Iglesia va explicitando-, que nos conducen hacia un verdadero ecumenismo, espiritual, respetuoso y siempre abierto hacia la verdad y el amor, como realidades presentes en el corazón de todos los hombres; así se va gestando un intercambio de dones pero no posturas relativistas.
Recordemos asimismo, que esta unidad ha sido desde siempre muy querida por el monacato; la intentamos vivir, favorecer, pero también todos la hemos de implorar pues esencialmente es un don del Espíritu Santo.
Ahondando en RB 68, J. Kodell, osb, destaca cómo abad y monje deben trabajar juntos para encontrar la Voluntad de Dios, pues ambos han de buscar siempre obedecerlo a Él con nobleza y rectitud. A su vez, el monje copto Matta-el-Maskîne (+), padre espiritual del Monasterio egipcio de San Macario, nos relata cómo su ser monje ha contribuido a enriquecer su experiencia de Dios en los demás, para poder guiarlos mejor en el seguimiento de Jesús en sus realidades concretas.
Y en este número, los amantes de la historia, se encuentran complacidos con dos relatos muy bien documentados: a través del artículo de Fernández Aguirre sobre los begardos y las beguinas, conocemos cómo en Europa, a lo largo de los siglos XIII y XIV, ya se propiciaba una religiosidad más interior, con características muy dispares y libre adhesión a Jesús y a María; y el P. Mauro Matthei, osb, a raíz del paso a la Casa del Padre del P. Santiago Veronesi, osb, nos ofrece no sólo una cordial semblanza de este monje tan próximo a todos nosotros, sino también una amena crónica de nuestra realidad monástica en el Cono Sur desde mediados del siglo pasado, las expectativas coincidentes con el Concilio Vaticano II, y cómo se dan los primeros pasos de nuestra actual Congregación y de nuestra publicación Cuadernos Monásticos.
Como coronación, se prosigue en la sección Fuentes con la publicación de la Primera Vida griega de san Pacomio, cuyo legado recoge felizmente san Benito.