MISIONERAS GUADALUPANAS DE CRISTO REY, O.S.B.
México, 27 de julio de 2013
Santo Padre Francisco,
México, 27 de julio de 2013
Santo Padre Francisco,
Jesucristo resucitado se aparece a los apóstoles
1443
Salterio y Nuevo Testamento
Utrecht, Holanda
«Los profetas eran los amigos del Padre iniciados por Él en sus misterios. Él les confió enigmas, alusiones a su Hijo. Él veló a Moisés, para que por este velo el mundo reconociese que era propio de la profecía el estar oculta. Todo el Antiguo Testamento se nos presenta velado, como Moisés, el tipo de toda profecía. Tras este velo, extendido sobre los libros de los profetas, aparecía Cristo, augusto juez, sentado sobre su trono de gloria...
Oh mi Dios, excelso y sublime, que te dignas mirar a lo débil[1],
mi alma y mi espíritu desfallecen ante tus infinitos beneficios.
Ábreme el tesoro de tu corazón tan misericordioso,
La incredulidad del apóstol Tomás
Hacia 1230
Homiliario
Alemania
La Resurrección de Cristo
1366-1367
Andrea de Firenze
Santa Maria Novella, Florencia, Italia
Santa Gertrudis de Helfta, detalle del ciclo de los santos benedictinos. Monasterio Hagia Maria Sion, capilla de San Benito, Jerusalén.
Mírame y considera quién soy, paloma mía[1]:
Entrada de Jesucristo en Jerusalén
Hacia 1140-1170
Capella Palatina
Palermo, Italia
Santa Gertrudis, talla de madera policromada, capilla doméstica del convento jesuítico de Tepotzotlán - Museo Nacional del Virreinato, Tepotzolán, México.
Por Olivier Quenardel, ocso[1]
Crucifijo
1268-1271
Cimabue
Arezzo, Italia